La Dirección General de Investigación y Desarrollo (DIGID) lleva varios años trabajando en armamento militar para la protección de los soldados argentinos y los cascos militares han sido, hasta ahora, uno de sus avances más importantes. Empero, China llegó con mejores ofertas y pone en riesgo todo el desarrollo nacional que se está llevando a cabo.
Hacer memoria. Durante octubre de 2024, el Ejército Argentino lanzó, a través del Boletín Oficial, una licitación para la compra de 700 cascos con diferentes características y que supliesen los altos estándares internacionales y nacionales.
Además de compañías locales, la presencia de grupos asiáticos se llevó la atención de muchos por sus costos, menores a los de fabricación local. Aunque, a pesar de ya haber sido comprados por distintas Fuerzas de Seguridad en el territorio, su calidad es inferior.
Según pudo averiguar Zona Militar, el principal problema se encuentra en que, con la idea de abaratar costos y cuidar el gasto público, idea presente en todos los sectores del Gobierno Nacional, se baraja la posibilidad de rescindir de las investigaciones de la DIGID y adquirir los productos chinos.
No solo se perjudicaría a un sector productivo importante para la autonomía e independencia militar, también se echaría a la basura todas las necesidades que ya había planteado el ejército como relevantes. Es decir, pensados para los oficiales terrestres nacionales.
Los cascos chinos cumplen con las normativas internacionales de seguridad NIJ 0106.01 y blindaje 0108.01 que no se asemejaría a las resistencias aumentadas que se proponen.
Características de los cascos militares de Argentina
En Xataka Argentina estamos al tanto de los avances en seguridad que hace el país y la protección para el cráneo no pasa inadvertida. Con la ayuda de ITP Argentina S.A. la primera serie producida cuenta con fibras de poliamida aromática y polietileno de ultra peso molecular (UHMW-PE).
A su vez, se diseñaron dos modelos, uno con corte medio a la altura de las orejeras y el otro de corte alto para operar de manera más cómoda con los equipos de comunicación. También incorpora protección balística y una alta integridad estructural, para cualquier golpe o traumatismo, resistencia a temperaturas extremas y bajo coste de mantenimiento.
Respecto a las normas internacionales, lo más importante, cumple con las certificaciones:
- NIJ 01.06.01 (National Institute of Justice)
- Norma ACH-2007 (Advanced Combat Helmet)
- Norma Nacional DEF AyE922-A-15.
“Estas normas establecen requisitos de rendimiento y métodos de prueba para cascos destinados a proteger al usuario de los disparos y esquirlas, obteniendo excelentes resultados”, sostiene el documento de presentación de los equipos.
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