Pasta de dientes eléctrica: así funciona el dentífrico del futuro creado por un argentino

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Mario Caironi, investigador de electrónica molecular del Instituto Italiano de Tecnología (IIT), diseño y construyo un transistor eléctrico a base de pasta de dientes para usos médicos. “La tecnología comestible es un campo radicalmente nuevo y lo estamos construyendo desde cero. Nuestra idea es demostrar que existen beneficios concretos”, explicaba el joven.

El objetivo del invento es que el dentífrico conduzca energía a pastillas inteligentes que tomarán los pacientes para mejorar el consumo de los medicamentos y realizar distintos controles. Las denominadas “pastillas del futuro”  junto a la electricidad enviada, permitirán ver como funcionan ciertos químicos dentro del cuerpo y en que aspectos se puede mejorar su deglución/ingesta.

La pasta está compuesta de ftalocianina de cobre, un pigmento azul brillante, que se usa en los lápices labiales y crema dentales, que no es perjudicial a la salud de las personas. Por día consumimos hasta 0,5 miligramos, lo que sería suficiente para producir hasta más de 10.000 transistores.

La Ftalocianina De Cobre Es Un Semiconductor Y Por Lo Tanto Desempena Un Papel Crucial En El Desarro

La ftalocianina de cobre desempeñará sin duda un papel crucial en el desarrollo del circuito de las píldoras. Otros componentes esenciales incluirán sensores encargados de la monitorización de cualquier parámetro relevante dentro del tracto gastrointestinal, y también estamos trabajando intensamente en su fabricación”, desarrollaba Alessandro Luzio, investigador parte del IIT.

El grupo de científicos sostuvo que la investigación en electrónica comestible puede reducir ampliamente el impacto ambiental en la tierra. “Imaginemos poder colocar una etiqueta inteligente directamente en nuestros alimentos que pueda evitar las falsificaciones, controlar la calidad y el deterioro de los alimentos a lo largo de toda la cadena, hasta llegar a la mesa. Pensemos en el impacto que esto podría tener en términos de reducción del desperdicio de alimentos, un grave problema social, económico y ético que está muy extendido en todo el mundo”, sostenían mientras piensan en crear un futuro mejor y más eficiente.

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